6 de noviembre de 2011

"Hazte con un millonazo" cada viernes

Llegar a casa pronto un viernes por la noche y encender la televisión es poco menos que arriesgarse a morir de tedio, cuando no de risa, porque te ríes por no llorar. Hay veces que encuentras algo interesante, casi siempre en tu pila de DVD, y otras veces te toca resignarte a ver lo que vea el resto, si es que estás en familia.

Este viernes tuve la oportunidad de ver cierto programa, llamado algo así como "Hazte con un millonazo", que me dejó sin palabras. No lo había visto hasta ahora, a pesar de que lleva un tiempo en antena, pero bien podría decirse que estaban intentando enganchar a un público aún poco fiel a base de preguntas facilonas que cualquiera (insisto, cualquiera) puede contestar en el 90% de los casos. Pese a todo, los concursantes piensan durante minutos si el esternocleidomastoideo es un músculo que se utiliza para chutar un balón, porque podría ser que dieras un toque de cabeza... o si sirve más bien para mover el cuello. 



Mientras lo hacen dividen su posible premio de fajos de billetes ficticios entre respuestas absolutamente equivocadas, "apostando" por cada una de ellas según su nivel de seguridad, como si todo estuviera orquestado desde un principio para que no llegaran a la tercera pregunta con más de la mitad del millón. Porque, francamente, es imposible fallar según qué preguntas. De esa forma llegan al final del programa con 50.000€, arriba o abajo, cuando si hubieran escuchado nuestros gritos desde el salón como mucho hubieran perdido 100.000€. 

Esto me hizo recordar tiempos memorables de este otro artista que comparte prime time con este programa los viernes por la noche. Aunque os parezca exagerado, el parecido entre la parodia y la realidad de este programa es absolutamente escalofriante. 



De todas formas, y pensándolo bien, siempre es mejor ver personas que intentan demostrar algún tipo de conocimiento (por mínimo que sea) que asistir a un desfile de pseudo-famosos en la quinta pantalla, personas o personajes que nunca tengo el gusto de conocer. 

¡Ánimo con las últimas horas del domingo! Algunas cadenas nos regalan películas decentes de vez en cuando... 

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